Mi problema es que soy demasiado sensible”, me dicen muchas veces en los acompañamientos individuales. Y yo digo que no estoy de acuerdo; que, a menudo, lo que tenemos es una sensibilidad normal en un mundo que no está preparado para acogerla; en una sociedad que se ha levantado sobre la insensibilidad. Para profundizar en este tema, puedes leer a Rita Segato y su Contrapedagogías de la crueldad, que desarrolla los mecanismos y efectos de la cosificación mediante la sobre-exposición a la violencia.

Tu sensibilidad es un don para crear, comunicarte, saber lo que necesitas en cada momento y relacionarte con otras personas. ¿Qué pasa si la escuchas desde esta perspectiva? Puedes empezar prestando atención al cuerpo, el maravilloso espacio en el que se unen las emociones y la mente. Aquí encontrarás una guía para empezar. También puedes escuchar esta charla También puedes escuchar Habitar y gobernar, una charla de Amador Fernández-Savater y Ya yo Herrero en la que nos plantean esta interesante cuestión: “Si la pandemia nos devolvió al cuerpo, ¿dónde estábamos antes?”

Ser sensible a las relaciones te permite disfrutar aquellas que son nutritivas para ti y establecer un límite con el resto; tejer la red de afectos que te permita ser y compartir la hermosa complejidad de ser quien eres en cada momento. Ser sensible a la naturaleza te permite disfrutar toda su riqueza; solo necesitarás salir a la calle y encontrarla para calmar tu sistema nervioso, sentirte parte de algo. Para profundizar en esta sensación de verdadera pertenencia puedes leer a Toko-Pa; para saber más sobre tu ser mamífero, te recomiendo Devenir animal. Eso sí: te resultará muy difícil leer a David Abram entre cuatro paredes, querrás salir al bosque y experimentar.

Ser sensible a tus propios estados internos (la sensación sentida [abre pdf] que te ofrece tu cuerpo y la información cognitiva, lo que piensas sobre las emociones) te ofrece la mejor guía posible para saber cómo estás, qué necesitas en cada momento y qué puedes hacer para estar mejor. Estar presente, escucharte y escuchar lo que sucede a tu alrededor, es el mejor alimento para crear: escribir, pintar, componer, son labores expresivas que se nutren de tu sensibilidad y, al mismo tiempo, la regulan: prestar atención a lo que sucede fuera te ayudará a entender mejor lo que pasa dentro, a la vez que te permitirá salir de la espiral de tus pensamientos.

¿Estás de acuerdo conmigo? ¿Te animas a escuchar a tu sensibilidad unos minutos cada día y escribir lo que llegue en tu cuaderno?

¿Qué ofrezco?

Tanto los acompañamientos como los talleres de Narrativas y otras lunas incluyen una perspectiva respetuosa con la sensibilidad y las experiencias difíciles previas, incluido el trauma. Aquí no hay prisa, no hay un lugar al que llegar ni una forma buena de hacerlo; pero sí hay una guía, que intenta ser firme y amorosa al mismo tiempo para ayudarte a conseguir lo que te propones cuando inicias una actividad conmigo. Al final de esta entrada encontrarás las convocatorias disponibles; también puedes consultar la agenda. Y si tienes cualquier duda, estoy al otro lado.

Gracias por leerme; por dedicarme unos instantes de tu hermosa sensibilidad.

Escritura y autocuidado: conocerte más para cuidarte mejor

  • Escritura y autocuidado: un viaje por tu interior, visitando también lo que te sostiene y sostienes en el exterior; un recorrido por el don de tu sensibilidad para elaborar un diario de autocuidado propio, conocerte mejor y descubrir recursos nuevos que te ayudarán a manejar situaciones difíciles. En oferta hasta el 31 de marzo.
  • Membresía Autocuidado cíclico: en comunidad o por tu cuenta, crearás tus propias prácticas de autocuidado incorporando saberes ancestrales para rehabitar el tiempo en espiral y comprender tu sensibilidad, descubriendo nuevos recursos para manejarla y disfrutar los dones que te ofrece. Tiene un descuento hasta el 5 de abril.
  • Escritura y sueños: para profundizar en el trabajo personal con los sueños apoyándonos en la escritura y explorando diferentes ámbitos artísticos en los que otras personas han creado a partir de ellos. También en oferta hasta el 4 de abril. Puedes anotarte ahora y hacerlo en comunidad o por tu cuenta, más adelante; no hay un plazo concreto.

Escritura creativa: escribir con libertad y disfrutar haciéndolo

  • Contar tu propia historia: un taller para ordenar y narrar tu historia de vida; leer el pasado para seguir escribiendo el futuro, lo por venir.

Acompañar con la escritura y las narrativas

Acompañar con la escritura y las narrativas es un itinerario formativo y una revisión de tus propias prácticas; un camino de autoconocimiento y autocuidado para comprender el lugar desde el que acompañas a otras personas, conocer los recursos que ya tienes; integrar saberes nuevos y confiar en tu quehacer profesional.


PD: En una versión más reducida esta es una de las cartas Palabras de luna, que envío semanalmente a las personas inscritas en el boletín de noticias. Algunas las publico aquí; otras no. Si todavía no las recibes, puedes suscribirte aquí y darte de baja cuando quieras.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.